Las diferentes rutas que conectan a América Latina con los diferentes mercados del mundo fueron revisadas por Maersk, línea naviera que entregó un completo panorama acerca de la situación en cada una de ellas. Si bien en general se aprecia que predomina la estabilidad, conviene poner atención a los diferentes desarrollos que se están produciendo en cada escenario.

• Asia- Costa Oeste: Con los cambios en los mercados de Europa y EE. UU., hay más espacio disponible para la demanda a corto plazo; La región inicia su temporada alta en agosto, la perspectiva sigue siendo positiva desde India y Medio Oriente, mientras que los contratos a largo plazo continúan funcionando bien.
• Asia- Costa Este: Dado que algunos operadores han desplegado capacidad adicional para agosto, se espera que la demanda para el tercer trimestre se mantenga fuerte, es posible observar fluctuaciones en las tarifas en el mercado abierto. El segmento de gran escala también está funcionando bien, pero un riesgo importante es la demanda de Argentina a medida que la situación económica se deteriora. Otro riesgo latente es la política COVID de tolerancia cero de China, junto con los cambios en la capacidad disponible implementados para agosto y septiembre antes de la Semana Dorada de octubre.
• Europa/Asia central, occidental - Costa Oeste: Los volúmenes se mantienen estables y se espera que las vacaciones de verano en Europa tengan un impacto medio a partir de agosto; el mayor riesgo en los mercados se centra en los itinerarios desde Alemania con paros sindicalistas que afectan principalmente a las operaciones de los puertos de Hamburgo y Bremerhaven.
• Europa - Costa Este: El mercado mediterráneo se mantiene fuerte y estable con un impacto mínimo por el efecto de las vacaciones del verano europeo en las cargas de agosto. El norte de Europa está bajo la presión de las huelgas en Alemania que afectan principalmente a las operaciones en los puertos de Hamburgo y Bremerhaven. Además, los sectores industriales siguen señalando el impacto en sus cadenas de suministro a causa del conflicto entre Ucrania y Rusia.
• Asia central, occidental – Costa Este: Con los cambios en los mercados de Europa y EE.UU., hay más espacio disponible para la demanda a corto plazo; esperando que esta región entre en su temporada alta en agosto, la perspectiva sigue siendo positiva desde India y Medio Oriente hasta América, mientras que los contratos a largo plazo continúan funcionando bien.

Rutas dirección norte 

• Costa Oeste-Asia: Se espera que los precios de la chatarra disminuyan, lo que podría afectar las exportaciones en los próximos meses. Los precios mundiales del cobre cayeron, pero las exportaciones siguen siendo fuertes. Los segmentos mineros en México continúan teniendo un buen desempeño. La temporada alta del aguacate mexicano comenzará en septiembre/octubre
• Costa Este-Asia: La demanda general continúa siendo impulsada por productos relacionados con proteínas en Asia, principalmente en China.
• Costa Oeste-Europa: Si bien los volúmenes son saludables, la capacidad introducida recientemente ha resultado en un mercado más débil con una utilización promedio del mercado del 90% entre los operadores sin demoras y reducciones significativas de tarifas en un enfoque a corto plazo. En tanto, el segmento de largo plazo se observa inestable con tarifas spot que ahora alcanzan niveles de contrato de largo plazo para todos todos los operadores. El principal riesgo por considerar, al margen de la política de tolerancia cero ante el COVID en China, es la capacidad disponible implementada para agosto y septiembre antes de la Semana Dorada de octubre.
• Costa Este-Europa: La cosecha de algodón está aumentando gradualmente ahora en agosto, ya que se espera que la temporada alta tenga lugar en el cuarto trimestre.

El factor climático 

De acuerdo con Maersk, en América Latina la situación relacionada con los disturbios climáticos es más estable en el Golfo de México. Sin embargo, en Chile se puede apreciar el deterioro de los itinerarios como resultado de las frecuentes ventanas cerradas de los puertos, debido a los fuertes vientos. Por otra parte, en los puertos de Itapoa y Paranaguá el tiempo de espera de un buque puede ser de hasta 1 día.